6.11.13

Un día de estos
me pondré a reflexionar
sobre el bien y el mal
como absolutos límites.
Ese día,
pero no antes,
podrás explicarme cómo logras
creerte propietario de la lógica humana,
de la verdad aún más ridícula
que tú.


1 comentario :

Manuel dijo...

Sin desperdicio. Cada verso de este poema es un grito.

Me gusta gritar a tu lado.